El candidato a Intendente del Frente para la Victoria y única oferta peronista, Pablo Navarro, pidió que el Partido Justicialista local acompañe a Julián Domínguez y Fernando Espinoza para las elecciones provinciales donde ese binomio tendrá que medirse ante la otra dupla, encabezada por Aníbal Fernández, el otro retador camino a la Gobernación bonaerense.
La razón de este posicionamiento no esconde mayores secretos ni acertijos. El compañero de fórmula que va en la nómina de este último es Martín Sabbatella, ex Intendente de Morón y líder de Nuevo Encuentro, el partido que gobierna su pago chico desde 1999 y que puso a todo el peronismo en crisis a fines de los noventa luego del Rousselotgate.
Navarro mantuvo una intensa y cordial conversación con el propio Domínguez y acordaron una agenda electoral para el distrito de zona oeste.
"El peronismo en Morón está más vivo que nunca y la esperanza del triunfo del peronismo representado por la lista 4 está llenando los corazones de los justicialistas con alegría, optimismo, sabiendo que el próximo Presidente de los argentinos será Daniel Scioli", aseguró el aspirante, que es también secretario de Niñez y Adolescencia en la provincia.
"Julián Domínguez y Fernando Espinoza son quienes van a representar verdaderamente al peronismo en la Provincia de Buenos Aires. El peronismo de Morón sabe claramente lo que hizo el sabbatellismo con el partido en los últimos años", fustigó el funcionario sciolista, tras su contacto con el ex ministro de Agricultura.
Cabe recordar que el sabbatellismo no sólo comanda la comuna en una de las hegemonías más fuertes del Conurbano bonaerense, sino, además, tiene una rivalidad histórica con el sector de Daniel Scioli, otro motivo de discordia con Navarro. Si bien Nuevo Encuentro aparece alineado con la candidatura de este último, el Mandatario provincial, también es cierto que en calle 6 todos recuerdan los gestos de Sabbattella en el pasado.
Y particularmente, siguiendo esa línea, la pica que hubo durante la campaña electoral del 2011 cuando el moronense compitió por la provincia en una boleta colectora habilitada por la Casa Rosada y con la que apenas pasó la barrera de los 5 puntos. La relación entre ambos sectores nunca volvió a ser la misma después de eso, más allá que el vínculo institucional entre las autoridades de la provincia y Lucas Ghi, actual alcalde, fue siempre óptimo.
De modo más amplio, el sentimiento de Navarro es el que también tienen algunos intendentes del Conurbano, especialmente aquellos ubicados más próximos a Morón y que no perdonan la "intromisión" de Sabbatella en sus territorios, no sólo en el pasado sino incluso este mismo año, donde varios de sus hombres jugarán las respectivas internas partidarias.
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